
Maia Orihuela celebra 20 años de carrera
La cantante villense repasó dos décadas de trayectoria y habló de su presente artístico junto a sus músicos Jopo y Davito, con quienes se presentó en el bar Botánico de Villa Constitución.
Previo a su reciente actuación en Botánico, uno de los bares culturales más activos de Villa Constitución, la cantante Maia Orihuela celebró sus 20 años de carrera artística. Con la calidez que la caracteriza, recordó sus comienzos y reflexionó sobre el camino recorrido:
“Mi primera vez ante el público fue en el cumpleaños número 100 de la librería Orihuela, en 2005. Canté tango, con unos nervios bárbaros… y desde ahí no paré más”, contó entre risas.
Orihuela, referente indiscutida de la escena musical villense, lleva dos décadas de trayectoria en las que combinó formación, sensibilidad y compromiso con su comunidad.
Un show íntimo y una historia compartida
La presentación en Botánico tuvo un significado especial. Además de marcar su primera vez en ese escenario, fue una oportunidad para celebrar el vínculo con el público local.
“Es un lugar hermoso, con un ambiente cálido y gente que disfruta de la música. Me encanta que existan estos espacios en Villa, donde se pueda compartir arte”, expresó.
En el escenario la acompañaron sus inseparables compañeros Jopo González (guitarra) y Davito Reynoso (percusión), con quienes comparte una relación artística que ya supera los 14 años.
“Somos una familia. Nos conocemos, nos reímos, nos entendemos. Es el vínculo más estable y largo que tuve”, bromeó entre anécdotas.
Repertorio ecléctico y emoción en cada canción
El trío interpretó un repertorio variado, con versiones de Fito Páez, Mon Laferte y otros referentes de la música en español.
“El amor después del amor es casi un himno para nosotros, pero siempre renovamos el repertorio para no cansar a la gente que nos sigue”, explicó.
Para Maia, cada canción tiene su propio peso emocional: “Me gusta cantar temas que digan algo, que generen emoción o reflexión. A veces elijo una canción porque me gusta su letra, y otras simplemente porque me hace bien cantarla”.
Maestra y aprendiz permanente
Además de los escenarios, Orihuela se dedica a la enseñanza del canto. “Cada vez hay más personas que quieren cantar, buscar su sonido, conectar con algo interno. Cantar es sanador”, afirmó.
Actualmente tiene su grupo de alumnos completo y organiza presentaciones privadas para ellos: “No me gusta exponerlos demasiado. Prefiero encuentros íntimos, donde puedan compartir su voz en un espacio de confianza”.
Una artista con raíces y orgullo local
Maia pertenece a una familia tradicional de Villa Constitución, vinculada a la histórica Librería Orihuela, y lleva con orgullo ese legado:
“No me pesa el apellido, al contrario, me enorgullece. Mi papá y mi mamá dejaron una huella muy linda en la ciudad, y eso me inspira. Espero seguir representando ese trabajo con amor y respeto”.
Presente y futuro con la misma pasión
Orihuela continúa trabajando con su trío y planea nuevos conciertos para los próximos meses. También proyecta un espectáculo especial para fin de año, para celebrar sus 20 años de carrera con el público villense.
“Después de tantos años, sigo sintiendo lo mismo: cantar me conecta con la gente. Es un acto de encuentro, de gratitud y de vida”, resumió emocionada.