Este sábado, el escenario de La Posada de los Muertos volverá a vibrar con las guitarras y la energía del rock clásico. Eternal Fire, una banda integrada por músicos de distintas generaciones de Villa Constitución y San Nicolás, se prepara para ofrecer un espectáculo lleno de historia, nostalgia y potencia musical.

Conformada por Alejandro Longo, Daniel Perrotti, Ariel Álvarez y Lucho Lacelotti (el más joven del grupo, oriundo de San Nicolás), Eternal Fire propone un viaje sonoro por el rock melódico de los años 80 y 90. Su repertorio incluye temas de bandas como Queen, Bad Company, Status Quo, Creedence y Kansas, entre otras. “Buscamos recrear los sonidos de esas bandas con el mayor respeto posible”, explica Longo, una figura histórica del rock local.

Eternal Fire nació como un reencuentro musical entre Longo y Perrotti, compañeros de banda desde sus días de secundaria, cuando tocaban en fiestas escolares con guardapolvo y guitarras prestadas. 

El regreso al escenario, esta vez con Eternal Fire, surgió casi naturalmente. La necesidad de revivir esas canciones que marcaron una época y de compartirlas con nuevas generaciones, se sumó al placer de volver a tocar entre amigos. “La idea es divertirnos y que el público también lo haga. Al final, siempre terminamos con una fiesta”, comenta entre risas Perrotti.

La Posada, un refugio para el rock

Tanto Longo como Álvarez destacan el trabajo realizado por Germán Fernández, impulsor del espacio La Posada de los Muertos, donde se realizará el show. “No se valora lo suficiente lo que se ha logrado ahí: un lugar con sonido e iluminación profesional, algo que no es común en la región”, sostiene Álvarez. “Villa necesita más espacios como este para que las bandas puedan tocar y sonar bien. El rock necesita su casa”, coinciden.

El show del sábado será la primera presentación oficial de Eternal Fire como banda completa. Lucho, el cantante más joven del grupo, aporta frescura y potencia vocal a un repertorio pensado tanto para nostálgicos como para nuevos oyentes. “Tenemos una propuesta accesible, con temas conocidos, melódicos, pero con la fuerza del rock”, dice Álvarez.

Además del recorrido por los clásicos, la noche promete momentos de celebración y encuentro con un público que ha seguido de cerca la evolución del rock en Villa. La banda invita a “romper todo” con la música, en el mejor sentido, y agradecer de antemano a Germán… “por si se rompe algo”.