
Valentina Colazo y Ariel Blanco, con la magia de la equitación
Juntos son los entrenadores, el alma y vida del Centro Ecuestre “El Paraíso” de nuestra ciudad. El 20 de septiembre serán anfitriones del “Young Riders Cup” en su primera fecha
Juntos son los entrenadores, el alma y vida del Centro Ecuestre “El Paraíso” de nuestra ciudad. El 20 de septiembre serán anfitriones del “Young Riders Cup” en su primera fecha, con convocatoria regional. Contaron todos los detalles en el streaming de Sur TV.
Llega, en el único centro de equitación que tiene la ciudad y la zona, esta fecha de saltos hípicos que brindará no sólo la adrenalina de lo deportivo, sino la magia de realizar una actividad teniendo el respeto por el animal como vínculo principal.
Además de contarnos sobre la fecha de competencia que se vivirá en unos días, también charlaron con Juan y Rodrigo sobre la importancia del vínculo emocional y la conexión física que se desarrolla entre jinete o amazona y caballo en un entorno natural, como pilar clave de una relación que se verá reflejada en los resultados deportivos.
-¿Cómo se trabaja este vínculo con el caballo como prioridad en este deporte?
-Es un respeto y contacto que se va trabajando. Por ejemplo, los chicos que vienen a esta escuela tienen actividades de contacto para hacer como el cepillarlos, limpiar cascos, los ensillan y salen a la pista, y es un trabajo que a ellos les gusta mucho. Así se van conociendo, entendiendo, es una confianza que se logra día a día. Además, se aprende mucho con el cuidado del caballo porque uno aprende a manejar la frustración. A veces uno va con todas las ganas y resulta que el caballo tiene un mal día, y las cosas no van a salir como uno pensó, así uno también va cambiando la personalidad, aprendiendo mucho con el cuidado y el respeto al caballo.
-Y ese vínculo es prioridad…
-El Jinete o la amazona es un binomio con el caballo, en un trabajo de a dos, en la unión del caballo con su jinete o amazona para tener buenos resultados, si hay distorsión en el medio entre ellos, los resultados nunca son buenos. Por eso existen los entrenamientos progresivos.
-¿Cómo iniciaron ustedes en esta actividad?
-(Valentina) Arranqué a los 6 años cuando era una nena compitiendo, hasta los 15 en Belgrano de San Nicolás. Luego me vine a Villa, traje mi caballo y abrimos la escuelita con 2 ponys, fuimos creciendo y hoy tenemos 10 caballos, lugar propio, pista, caballeriza… Haber montado de chiquita me dio experiencia para entender a las nenas de cómo se sienten haciendo esta actividad.
-(Ariel) Me dedico desde hace 18 años. Pertenezco a una fuerza federal, trabajo actualmente en un lugar con caballo y hace 15 años hice el profesorado de equitación en la escuela militar, en el ejército. Me recibí primero de maestro de equitación y después de profesor en la parte deportiva de la fuerza a la que representaba. Hace 8 años me vine a Rosario hace 8 años, y fue la primera vez que di clases por fuera de las fuerzas, hasta que vengo para Villa y el IG nos unió con Valentina, empezamos a hablar y empecé a hablar con ella.
-¿Es caro hacer equitación?
-A comparación de otras actividades, sí. La logística es complicada porque implica un traslado para el caballo además del nuestro, con los cuidados necesarios por el estrés y en este deporte lo principal es tener los caballos en condiciones, pero para nosotros es un privilegio este centro ecuestre de la zona.
-Pasando a competencia de este sábado 20, ¿en qué consiste?
-Son saltos hípicos, esa es la competencia en diferentes niveles de dificultades. No es una carrera como el turf, es en una pista de 50m cuadrados la nuestra, con armadores que en este caso somos nosotros, que hacen el recorrido con una forma que se inicia a principio de año con una forma sencilla, y a fin de año se hacen recorridos más cerrados con mayores dificultades, porque supuestamente en ese tiempo uno ha mejorado el trabajo con el caballo. También se puede competir por ‘tiempos óptimos’, que lo establece la comisión organizadora que da como ganador al jinete o amazona que más se acerca a ese tiempo. Otra forma es ´tiempo directo’, cuando gana quien menos tiempo hace sin tirar obstáculos.
Diseñador de pista hace el diseño de las dificultades que son varias como por ejemplo, los corrales que son dos vayas seguidas, muy pegadas una a la otra; por ahí son triples como filtro, porque son tres altos seguidos con 7m50 de un galope, de dos galopes de 10m50 o 12m50s; otras de las distancias, de 10m50 y 7m50 los triples, etc. con una habilidad y un trabajo con el caballo, las piernas acciona sobre el caballo que debe ir, volver, las piernas accionando con movimiento corporal, etc.
Distancia entre una vaya y otra y la altura. Detrás de un concurso que dura un minuto, hay un año detrás de trabajo o más tiempo también.
-¿Cuándo son las clases?
-A la mañana estamos desde las 9 y a la tarde todos los días. Los sábados sabemos hacer prácticas, como amistosos internos con pic nic, reuniones, integración. También tenemos clases teóricas que sirven mucho, y todos sirve esto de la identidad del club que también nos importan trabajar, son nenas de 6 hasta 16 años, que entre ellas se llevan muy bien y es lindo trabajar esa pertenencia de grupo también. También quiero aclarar que no es obligación competir, hemos tenido una alumna que arrancó a los 60 años, que no quería saltar y era feliz montando, dando unas vueltas trotando.
La competencia de este fin de semana es la primera fecha de dos totales, siendo la segunda en el Centro Hípico “Las Lechuzas” de Funes, el 11 de octubre como cierre. En ambas habrá saltos de y pruebas de 30cm, 40cm hasta 1m, entre otras dificultades.