El concejal Oscar Heredia presentó un proyecto de Ordenanza para crear el Programa de Prevención y Control de Alcoholemia, que contempla la realización de tests a conductores y determina las condiciones en que los mismos deben hacerse, disponiendo la retención del vehículo de los infractores y las correspondientes sanciones.
“En Villa Constitución se hacen algunos controles pero no hay nada legislado, es importante que una Ordenanza obligue al Municipio a hacer los tests de alcoholemia periódicamente”, argumentó el edil justicialista.
La iniciativa contempla que el Departamento Ejecutivo deberá llevar adelante “una amplia e insistente campaña de concientización durante un período no menor a los 30 días anteriores a la implementación del control de alcoholemia, difundiendo la finalidad del mismo e invitando a padres e instituciones a participar en la tarea de prevención”.
Contra las “previas”
En la sesión, el concejal Heredia sostuvo que “existe un gran consumo de alcohol en los jóvenes, que los descabeza, los deja sin sentido y hacen cualquier cosa, sin controles efectivos para evitar que esos jóvenes conduzcan en estado de ebriedad, como ocurre actualmente en las calles de nuestra ciudad”.
“Estoy muy disconforme con los padres que permiten las famosas ‘previas’ y hasta les compran alcohol a sus hijos. Estamos mirando para otro lado mientras nuestros chicos se descabezan tomando. Es una aberración permitir esto”, manifestó.
Objetivos
El Anexo A del proyecto de Ordenanza elaborado por el Bloque Justicialista explica los objetivos del Programa de Prevención y Control de Alcoholemia, entre los que se destacan los siguientes: Optimizar el tránsito y la seguridad vial para mejorar la calidad de vida; disminuir las cifras de accidentes de tránsito, a través de la concientización en la capacidad conductiva; disminuir las cifras de accidentes de tránsito; concientizar a los conductores acerca de las consecuencias de conducir bajo los efectos del alcohol; detectar y evaluar la incidencia de quienes conducen bajo el efecto del alcohol; y favorecer la participación ciudadana para reforzar la concientización de los riesgos de conducir alcoholizado, en la lucha por mejorar la seguridad y la disminución de los accidentes.
