“Tenemos una masa societaria de 250 activos y este es nuestro principal ingreso, pero en este mes ya hemos recibido algunas renuncias”, indicó.
La realidad de los clubes es realmente preocupante, con todas las partes que lo integran poniendo su cuota de esfuerzo para mantener la institución en pie en estos tiempos que se avecinan, de crisis, una vez más.
El Náutico Bartolomé Mitre está conducido por un nuevo grupo de trabajo desde el año pasado, hoy presidido por Mónica Martínez. Desde el ingreso de esta Comisión, las principales problemáticas que se encontraron fueron la deuda de gestiones anteriores y la bajante del río que, lamentablemente, se ha ido intensificando con el correr de los meses.
Al primer punto pudieron darle una salida firmando convenios de pagos que vienen llevando al día, el segundo hasta hoy sólo les ha generado gastos nuevos que, además, se suman a la complicada actualidad mundial de receso por la pandemia Covid-19.
“Con la poca agua que hay en el río tuvimos que hacer una caleta nueva a la altura de la terminal 1, al lado para que los socios puedan usar sus embarcaciones y seguir llevando adelante el club. Eso fue un gasto extra y además, hoy, además que no hay agua no pueden salir al río por las medidas de aislamiento, así que varios ya presentaron la renuncia al no poder usar el servicio”, dijo en un inicio Martínez.
Continuidad
El club llega a abril al día con los honorarios de sus trabajadores y también con los impuestos como luz, gas e internet.
“Nuestra cuota societaria activa hoy es de 250 personas que abonan $350 por mes y es nuestro ingreso principal, con ello solventamos las principales obligaciones como el sueldo de los trabajadores del club que hasta abril fueron pagados en un 100%”, detalló la presidenta.
Y continuó: “Pero desde el mes de mayo es posible que no podamos abonar el sueldo completo, ya lo charlamos con ellos y lo entendieron porque siempre para esta comisión, a la hora de establecer prioridades, su sueldo fue una de las principales. Entonces hoy están dispuestos a continuar trabajando más allá de los problemas que se presentan. Esperamos poder tener alguna ayuda, del gobierno nacional, provincial o local para afrontar estas cuestiones.”
El club hoy tampoco cuenta con los diferentes servicios de alquileres que les generaban activos, debido a las medidas que prohíben las aglomeraciones hasta el levantamiento de la cuarentena. Además, se estima que las actividades de los clubes por considerarse de recreación y las que mayores aglomeraciones concentran, serán una de las últimas en volver al ritmo habitual.
