En una nueva entrega, la Escuela de Oficios y Saberes junto con Ana Boulán, directora del Proyecto «La EOS y los Músicos Villenses», presentan a Betiana Charny, otra talentosa joven de nuestra ciudad, quién se exhibió afirmando que «soy de Villa Constitución, empecé a estudiar música de niña; gracias a Jorge Menna y al Coro de niños de la Seño Popi Herrera, que me ayudaron a cantar».
Respecto a sus comienzos en el arte y su correspondiente educación, la villense contó que «a los 16 años, empecé el ciclo básico de formación Musical en la Escuela de Música de la Universidad Nacional de Rosario, en la carrera de Composición; y cuando egresé, estaba paralelamente estudiando dirección coral y canto”.
Sin embargo, seguidamente reveló que “desde que empecé a meterme en el mundo de la voz, me fui involucrando cada vez más con ella, tratando de entenderla y de conocerla anatómicamente, funcionalmente, y gracias a esta intriga o ese interés, me fui metiendo también en el mundo del movimiento”, en este marco es que confesó que “con el correr de los años, fui encontrando otras disciplinas y profes que integraban y conectaban estas dos intrigas o estas dos experiencias: la vocal y la corporal».
Estilos musicales, búsqueda y docencia
En cuanto a su desarrollo en las disciplinas, la artista expresó que «en el último tiempo he pasado por muchos estilos musicales, cantando siempre canciones de música popular, sobre todo de Latinoamérica”.
“Hice dos discos solistas, viví un tiempo en Buenos Aires y ahora estoy de nuevo acá y mi búsqueda estética, en este momento, vuelve un poco a esos años de la facultad, de la performance, del encuentro con la improvisación, con el cuerpo y con la vocalidad en todas sus formas”.
Por otro lado, afirmó que “soy docente, me dedico a dar clases en ‘Integración Movimiento & Voz’, que es el nombre que le di a este espacio de laboratorio vocal”, aunque en este contexto de pandemia y emergencia sanitaria explicó que “en este momento, estoy dando clases por Zoom y gracias a la virtualidad, puedo compartir esta experiencia con gente de otras ciudades, ahora de manera semanal. Así que también, los invito a sumarse a mis páginas donde está toda la información de los talleres y las clases».
Betiana y la movida local
En cuanto a la organización de artistas y el desarrollo de la movida local, Charny ofreció su perspectiva opinando que «en la ciudad, por suerte hay cada vez más propuestas artísticas”. Seguidamente, destacó “creo que la creación de la Asociación de Músicos es un hito muy importante. Felicito a mis colegas por esa iniciativa que no es nada sencilla: el luchar por los derechos de los músicos y organizarse”.
“En nuestra ciudad y el país, hay una cantidad inmensa de músicos talentosos” resaltó y prosiguió “ojalá que se pueda lograr el resguardo de los derechos de les músiques y que se pueda pensar en un lugar para que se escuchen todas las voces; que invite y contagie a la juventud, a los nuevos buscadores de sonidos; para que sepan que hay un horizonte para ellos. Está re bueno que las generaciones se entrelacen y que juntos vayan abriendo espacios en los escenarios”.
Músicos, autogestión y feminismo
“Muchas veces, se complica ser tu propio gestor, tu propio diseñador, tu propio manager, tu propio agitador en las redes, es muy desgastante eso”, expuso.
“Lo que nosotros necesitaríamos es dedicarnos a hacer música y no tener que estar pendiente de tantas otras cosas”, señaló y agregó “pero bueno, lo interesante creo, de este momento, es que se están organizando los grupos y los colectivos, eso me parece algo para celebrar y participar”.
En este marco, subrayó que “veo que la escena local está floreciendo y que hay un montón de propuestas súper interesantes. Y que hay pibes tocando. Esto está re bueno”, por lo que recordó que “en mi época, me acuerdo que no había tantas mujeres en los escenarios, y hoy, por suerte y por el feminismo, hay un montón de mujeres tocando instrumentos, cantando, haciendo sus canciones y eso me parece también algo digno de admirar, de replicar y celebrar».
