A Analía Martín
Con profunda congoja y cierta incredulidad, llegué el día 13 a mi lugar de trabajo, el Honorable Concejo Municipal. Conocí a Analía Martín en el año 1986. Solía decirme que envidiaba mi militancia y que algún día ella participaría más activamente: lo logró.
A veces llegaba con una gran sonrisa, con tristeza, con esperanza, cabrona y solidaria. A aquellos pocos que se preguntaban por su ausencia, en los últimos tiempos, en las sesiones del Concejo, en la noticia de su fallecimiento habrán encontrado la respuesta.
Aferrada a la vida acompañada de sus seres queridos, médicos y su profunda fe en Dios.
A los vecinos les dejo una reflexión: la concejal Analía Martín jamás hizo de su enfermedad un eslogan de campaña porque vivió, siempre vivió, a su manera. Te voy a extrañar Analía.
Gloria Griselda Castro – Empleada del HCM