Empalme: desvalijaron la vivienda de una docente
Una vivienda ubicada en calle Ayacucho al 200 de barrio San Alberto de Empalme fue asaltada por delincuentes en momentos en que sus propietarios no se encontraban en ella. El robo no fue un hecho aislado ya que las víctimas indicaron que en las últimas semanas hubo otros ilícitos similares y que a principios de año el vecindario padeció “una seguidilla de robos”. El “escruche” fue perpetrado en la tarde del martes, entre las 14.30 y las 17, cuando todos los moradores se encontraban trabajando. Aprovechando esa circunstancia los malvivientes violentaron la reja de una ventana por la cual ingresaron al comedor de la finca y se abocaron a revolver toda la casa en busca de objetos de valor causando un gran desorden.
La ventana por la que accedieron está situada sobre un lateral de la vivienda, a escasos centímetros de la vereda por lo cual resulta llamativo que nadie haya advertido el accionar de los asaltantes, los que se presumen eran al menos dos. Estos arrancaron un barrote de la reja y por ese estrecho espacio lograron abrir la venta e introducirse a la vivienda. Cuando la dueña de casa, Clide Di Fulvio, conocida docente de la localidad, llegó a la casa encontró con luces encendidas, el mueble de la computadora que está en la sala, vacío y un gran desorden en los dormitorios, con ropa desparramada por todos los rincones.
“No me animé a entrar (a las habitaciones), pero tampoco salí, lo primero que hice fue llamar a la Policía y ahí si, abrí la puerta y me fui afuera”, relató aún conmocionada a Diario EL SUR. Por todo lo que sustrajeron “más de uno era seguro”, agregó Di Fulvio. Algo que le llamó la atención fue que el mayor desorden se encontraba en las pertenencias de su hijo el cual es disc jockey y al que le llevaron un mezclador de sonido, entre otros objetos de valor. “Ropa no nos robaron, salvo un par de zapatillas nuevas de mi hija”, puntualizó. En el dormitorio de Clide los ladrones revolvieron los cajones hasta dar con los alhajeros de los cuales sustrajeron “anillos de oro, los regalos de 15 de ellas (por las dos hijas) que son como 10 anillos, cadenitas de oro”.
“Nadie vio nada”
Además los asaltantes se llevaron una computadora con monitor LCD, un portarretrato digital, una cámara digital, una tablet, celulares viejos y 700 pesos “que estaban a mano; cajitas con monedas había por todos lados pero eso no lo tocaron”, señaló. Añadió que además intentaron sustraer una segunda computadora “que quedó colgando pero se ve que pasó algo y no la pudieron llevar”. Repitió que “lo extraño es el lugar por el que entraron, está tan expuesto que alguien tendría que haber visto lo que pasaba”. Cabe destacar que los ladrones entraron y salieron por la misma ventana. “¿Cómo es posible que nadie vio nada?, hasta la misma policía me dijo que pasó tres y media y no vio nada. El Tupe para en la esquina, ¿y nadie vio nada? Me llama mucho la atención”, protestó la víctima.
