No es la primera vez que procuro conectarme con nuestros vecinos a través de este medio, con la sincera intención de concientizar y enfocar los problemas y arbitrariedades de las que somos sujeto a través de los funcionarios de la Municipalidad, incluyendo al intendente, así como de los propios concejales, que “nos representan”.
En este nuevo intento, voy a mencionar algunos de los puntos relevantes, no son todos, porque para ello debería escribir un libro:
1. El “Vale Ciudad” con, cuya manta de publicidad, pretende cobijarse el Municipio, supuestamente debería premiarnos a todos los contribuyentes que estamos al día con nuestras tasas. Esto es una falacia, la mayoría de las personas de la ciudad nos manejamos con tarjetas de débito/crédito, con lo cual sobre los víveres ya tenemos garantizados el 5% de devolución del IVA, asimismo, todas las tarjetas tienen días promocionales para el consumo con, desde un 10 al 15% de descuento o reintegro, con lo cual la utilización del “Vale Ciudad” es absolutamente inútil.
Si se analiza el tema desde otro punto de vista, desde el Estado Nacional y la AFIP se fomenta la bancarización y la utilización del plástico por la gente por dos razones no excluyentes: a) es más seguro no operar en efectivo, tanto para el comprador como para el vendedor y, b) se evita la evasión fiscal. La Municipalidad en su acuerdo con los comerciantes, parece no haber tenido en cuenta ninguno de estos muy importantes aspectos, y cuando me expresé de tal forma con un funcionario llegó a exclamarme que los comerciantes tenían un costo por operar con la tarjeta, pero omitió decirme, pensando que soy una ignorante, que el comerciante tiene más ganancia por mayores ventas (economías de escala) que no tendría sin el uso de las tarjetas, que tiene menos fondos en efectivo ante un atraco y, por ende, menor riesgo, que carecería de todo el cambio necesario para dar los vueltos y, que operar en efectivo le permite “negrear”.
Como decía mi padre: “Prohibido criticar sin proponer”; si el objetivo es premiar al buen contribuyente, que nos premien a todos los que tenemos nuestras tasas al día no sólo a los que manejan efectivo. Eso se lograría mediante una reducción de los cargos a todos los cumplidores. No es así??
2. En nuestro barrio los vecinos estamos pagando la obra de carpeta asfáltica, la que por un acuerdo se paga anticipadamente. En mi caso particular este mes venció el día 15 (domingo).
El lunes olvidé el comprobante en la oficina y para evitar hacer varios km de ida y vuelta, perder tiempo en el trabajo para luego no tener donde estacionar, me dije que al ser un pago anticipado daría lo mismo pagar al día siguiente, que ingenua!!!
Cuando voy a pagarlo a la caja, el cajero me solicita que lo reliquide porque estaba vencido, cuál fue mi sorpresa al comprobar que me cobraban un mes de punitorios, no un día. Esto no lo vi ni en los impuestos provinciales ni en la AFIP. Un pago anticipado con Intereses de un mes por un día de atraso!!!!! el Municipio, es sin duda un usurero fiscal. Planteé mi punto de vista ante el responsable de Rentas y me contestó que había un decreto, bla bla bla. Qué buscan estos señores???…. recaudar para la obra, permítanme dudarlo.
Si hay un punitorio por pago fuera de término, con los sistemas informáticos actuales bien pueden calcularse por día no por un mes, con lo cual se genera un vicio por el cual el contribuyente, si se atrasa no va a querer pagarlo al día siguiente sino a último momento antes del vencimiento, porque, simplemente da lo mismo.
Trabajé toda mi vida en Sistemas y hacer esto más equitativo no es un imposible y es muy necesario.
3. No todas son pálidas, no debo dejar de mencionar que, no obstante haber tenido problemas
anteriormente con el Sector Comercio, nuestra relación empresa – Municipio, otrora maltrecha con ese sector ha quedado zanjada, siendo en la actualidad absolutamente cordial y fluida.
Conclusión: y en esto debo seguir citando a mi padre: “No se queje si no se queja”, de nada vale que manifestemos nuestro descontento entre nosotros, los vecinos, si no somos capaces de hacer algo para que la situación cambie, está nuestro voto, pero además entre voto y voto tenemos a la prensa (el cuarto poder) para manifestar las inequidades personales y patrimoniales con las que somos avasallados.
Tan sólo dejo una inquietud para reflexionar: “¿Cuándo esta gente dejará de subestimarnos y se pondrá a trabajar para sus contribuyentes solucionándonos nuestros problemas y deje de tratarnos como si fueran de otra estirpe?
Lic. Ana Lía Ferrari DNI 11.151.971