Dos motos robadas fueron recuperadas por personal policial, una de ellas en el transcurso de un control vehicular de rutina que realizaba la Brigada Motorizada y la otra en un hecho insólito ya que el ladrón la dejó abandonada frente a la sede de Comando Radioeléctrico. El primero de los procedimientos se efectuó en la noche del lunes, en la zona céntrica, y el segundo en el mediodía del miércoles, en barrio Luzuriaga.
El lunes, aproximadamente a las 20.30, el personal de la Brigada Motoriza, procedió a identificar un motociclista en la intersección de Sarmiento y 14 de Febrero, quien se movilizaba en una Honda 150. “Nos llama la atención por las características que tenía la moto y una vez allí se logra le detención de un masculino, y solicitando información por sistema 911, resulta que esta tenía pedido de secuestro de la ciudad de Rosario por un robo calificado”, explicó el jefe de la Brigada, oficial Juan Pablo Robledo.
“Se hizo el procedimiento según el protocolo que indica la jefatura y se procedió a la detención del masculino y al traslado de la moto”, señaló Robledo. El detenido resultó ser un individuo mayor de edad, oriundo de nuestra ciudad, quien quedó a disposición del Ministerio Público de la Acusación.
Sorpresa
El segundo de los hechos ocurrió el mediodía del miércoles. El jefe de Comando Radioeléctrico, comisario Herman García, regresaba a la sede policial, sita en Av. San Martín y calle Luzuriaga, en el barrio del mismo nombre. Cuando se aprestaba a ingresar el móvil en el galpón observo a un joven que llevaba una moto, el cual al advertir su llegada abandonó el vehículo y emprendió una veloz carrera por calle Luzuriaga, por lo que inició su persecución.
Al sospechoso lo esperaba otro joven en calle Rivarola en una moto y juntos iniciaron una huída por el interior del barrio Luzuriaga sin que los móviles policiales que montaron un operativo cerrojo lograran dar con ellos. Se sospecha que podrían ser oriundos de San Nicolás. En tanto se procedió a secuestrar la moto e ingresarla a la sede de CRE, hasta ese momento sin conocerse su procedencia a la vez que se constató que no presentaba pedido de secuestro.
La dueña
Minutos después se presentó en la sede de Comando una joven, acompañada de su madre para denunciar que alrededor de las 12.15 le sustrajeron su moto, una Zanella de 110 cc cuando se encontraba estacionada fuera de su lugar de trabajo, en San Martín al 4600, en barrio Ré. Grande fue su sorpresa al descubrir que su vehículo ya estaba en poder de la policía. Cabe destacar que la moto presentaba el tambor de la llave violentado por lo que desde la UR VI recomendaron extremar las medidas de seguridad a la hora de dejar las motos en la vía pública.
